Pasamos el jueves marcado por el ecuador del campamento.
Nos levantamos con aún más travesuras del zorro, que poco a poco va completando sus misiones.
Hoy nuestros peques disfrutaron del paintball infantil. Una experiencia divertida que ha trascurrido sin percances.
Divididos en 3 grupos por edades y siguiendo las normas de Jorge, nuestros pequeños judocas se metieron en el papel y lo dieron todo en el campo de combate.
Mientras tanto nuestros mayores realizaron la clase de Judo con Alberto y Cristina.
A final de la mañana tuvimos la suerte de contar con Javier Rivero, director técnico del club, que se acercó para ver en primera persona a nuestros judocas.
Después de comer realizamos el taller de masaje y de relajación, donde otro año más, la dulce voz de Amaya dejo secos a los judocas tras la intensa marcha de 4 días.
Por la tarde aprovechando el caluroso día fuimos a la piscina donde nos refrescamos con chapuzones y helados.
La cena con la pizza casera fue un éxito y los chicos repitieron varias veces.
Para acabar el día realizamos los juegos de mesa por equipos. Juegos clásicos como el twister, pictionary, pi, password o party les hicieron trabajar duro en equipo y darle al coco.
Los mayores aún aguantaron una última ronda final para poner fin a este día.